En Majadahonda, las lluvias de otoño y la humedad acumulada en jardines y zonas verdes son un detonante para la proliferación de plagas. Caracoles, babosas, mosquitos e incluso termitas encuentran en este entorno el hábitat ideal para crecer rápidamente.
A diferencia de distritos más urbanos, aquí el riesgo se concentra en chalets, urbanizaciones y comunidades residenciales con jardines, donde las plagas no solo afectan al exterior, sino que pueden extenderse hacia las viviendas.
Plagas más comunes en Majadahonda tras episodios de humedad
- Caracoles y babosas: atacan plantas ornamentales, césped y huertos familiares.
- Mosquitos: proliferan en aguas acumuladas en fuentes, piscinas mal mantenidas y sistemas de riego.
- Hormigas: invaden cocinas y despensas cuando la humedad desplaza sus nidos.
- Termitas: afectan a estructuras de madera en viviendas y pérgolas de jardines.
- Cucarachas: aunque menos visibles, también se refugian en alcantarillado y garajes.
Impacto en hogares y comunidades
- Jardines y urbanizaciones: césped y plantas dañados, proliferación de babosas y mosquitos.
- Viviendas particulares: riesgo de termitas en muebles, estructuras y suelos de madera.
- Comunidades de vecinos: garajes y trasteros con humedad se convierten en focos de cucarachas.
Recomendaciones específicas para Majadahonda
- Revisar sistemas de riego y drenaje en jardines para evitar aguas estancadas.
- Mantener piscinas y fuentes limpias, evitando convertirse en criaderos de mosquitos.
- Retirar restos de hojas y poda para reducir alimento de caracoles y babosas.
- Proteger estructuras de madera en pérgolas, cercas o porches frente a termitas.
- Planificar revisiones periódicas en comunidades residenciales para anticiparse a infestaciones.
El entorno verde y residencial de Majadahonda la hace especialmente vulnerable a plagas ligadas a la humedad, como caracoles, mosquitos o termitas. La prevención y las inspecciones periódicas son esenciales para mantener jardines y viviendas en perfecto estado tras las lluvias.
